Me gustaría poder decir que sos lo que alguna vez soñé. Pero creo que sos todo lo contrario a eso. Sos totalmente lo opuesto a lo que siempre quise en mi vida. Y debe ser por ello que te amo de esta manera. Debe ser porque me enseñaste a amarte tal y como sos, a enamorarme de cada uno de tus defectos, a amar hasta nuestras discusiones y necesitarte así, siendo tan vos, tan irritablemente vos..
Debio ser aquel beso a escondidas, separados por mundos tan diferentes y por circunstancias que ambos forjamos para que no se interpusieran en lo que queríamos. Y me besaste, y te besé. Todo empezo tan fácilmente y a la vez extremadamente conflictivo, extremandamente difícil. ¡Quién lo diría!, paso tanto tiempo de aquel beso. Y pasaron tantos besos de por medio, y tantas lágrimas. Fuiste y sos mi perdición, aparentemente un mal en donde me metí, según dice todo el mundo, y el bien que me haces y que me hace tenerte cerca.
Es simplemente inexplicable; el abismo que se interpone parece de momentos tan inmenso, pero eso no impide que te llene de caricias una tarde cualquiera.
No sos lo que soñé, sos aún muchísimo más de lo que alguna vez espere.. Y te amo, como sos, con esa linda sonrisa que tenes y con tu estúpido orgullo. Te amo con tus miedos, y con esos momentos en que me sorprendes totalmente. Te amo así. Te amo.
domingo, 10 de octubre de 2010
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Dependencia de tu amor
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