Creo que me llego la hora de escribir los versos finales. No es que quiera, no es que bajo ninguna condición voluntariamente hubiese querido, es lo que me limitaste a hacer. Y creo que algún día te voy a estar agradecida, aunque hoy las heridas sigan desangrándose rápidamente, aunque duela inmensamente, aunque no haya lugar para la rabia. Hoy es solamente tristeza. Y es lo único que voy a permitirme sentir por ahora, quizás angustia, quizás decepción también y luego, en algún momento.. todo culminará.
El tiempo pasa rápido y no nos va a esperar, ni a vos ni a mi. Vos enfrascado en tu vida bajo el techo de tu seguridad, yo con las alas en dirección al cielo, allí es donde quisiera llegar. No quiero ninguna frontera en mi vida, quiero volar alto, no necesito ninguna seguridad. Si me caigo, lástima, tal vez consiga levantarme. Pero estoy dispuesta a correr ese riesgo. Que tristeza que no puedas decir lo mismo, pero si tu concepto de felicidad se encuentra en la "seguridad", allá vos.
Te deseo buenos augurios, te deseo mucha paz y "tranquilidad", que es lo que tanto anhelas. Te deseo que nunca estrelles sin anestesia contra ninguna pared que te haga recordar mi nombre, porque creeme, me vas a extrañar..
domingo, 1 de agosto de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario